Después de más de 17 años trabajando con empresas de todos los tamaños y sectores, hay algo que se repite como un eco, una y otra vez. Me lo han dicho gerentes de capacitación con sensaciones de frustración, resignación y a veces hasta con cansancio:
- “Los jefes no apoyan la capacitación. No mandan a su gente.”
- “Los colaboradores vienen a fuerza, sin ganas. Se sienten castigados, como si los estuvieran obligando a perder el tiempo.”
- “No me aprueban el presupuesto. Siempre hay cosas ‘más urgentes’.”
¿Te suena familiar?
Sí, lo sé. Es como si intentaras inflar un globo con un pequeño hoyito: por más aire que le pongas, nunca termina de despegar. Y lo peor es que tú no eres el problema.
Ni tú, ni los jefes, ni los colaboradores.
El verdadero reto está en la estrategia.
Cuando la capacitación no funciona, no es por falta de voluntad. Es porque las piezas están desalineadas.
Como si todos tuvieran buenas intenciones, pero nadie hablara el mismo idioma. ¿Resultado?
La capacitación se ve como un gasto, no como una inversión.
Como una obligación, no como una oportunidad.
¡Pero hay luz al final del túnel! Y empieza por ti.
Sí, porque tú puedes ser un agente de cambio al generar la estrategia que conecte los intereses del colaborador, las metas del jefe y los objetivos de la empresa.
¿Suena idealista? Te aseguro que no lo es. Lo he visto pasar. Y en este artículo, mi objetivo es ayudarte a que tú también lo logres.
Lo primero es dejar de luchar contra la corriente y empezar a crear corriente.
Vamos a darte claridad:
¿Qué es un DNC y por qué es clave para tu empresa?
La Detección de Necesidades de Capacitación (DNC) es el primer paso para diseñar un programa de desarrollo que realmente impacte en los resultados del negocio.
Un DNC bien hecho alinea los objetivos organizacionales con las metas personales de los colaboradores y define habilidades específicas a desarrollar.
Antes de diseñar una capacitación atractiva, es fundamental saber qué necesita realmente tu equipo. Te comparto estas [5 claves para una DNC efectiva]que te ayudarán a evitar desperdicio de recursos y aumentar el impacto.
¿Cuáles son los errores más frecuentes al momento de realizar tu programa de capacitación?
1. No tomar en cuenta a la persona
Un error común es diseñar planes genéricos sin conocer los deseos, aspiraciones y metas personales de los colaboradores. Esta desalineación provoca desmotivación y baja adherencia al plan. ¿Quieres sembrar talento? Primero conoce el terreno.
2. Ignorar la visión del jefe inmediato
Cada jefe tiene una mirada distinta sobre su área. Si no conoces sus prioridades, oportunidades de mejora y expectativas de desarrollo, tu propuesta de capacitación perderá fuerza y respaldo.
3. Desconectarse de las tendencias actuales
Hoy, la capacitación efectiva es breve, personalizada y tiene objetivos claros. Ofrecer cursos online sin caducidad ni acompañamiento es como dejar libros en una estantería esperando que alguien los abra.
4. Falta de seguimiento y evaluación continua
Muchos programas se evalúan solo al final, lo que impide corregir el rumbo. Sin retroalimentación constante, pierdes oportunidades de mejorar y de medir el impacto real.
5. Nunca involucrar al gerente, coordinador o supervisor desde el inicio del proyecto
Los jefes creen que te están «ayudando» al participar, cuando en realidad tú estás ayudándolos a tener un equipo más competente. Si no comunicas bien ese beneficio, perderás su colaboración.
Antes de pensar en formatos o plataformas, recuerda que la capacitación también es una forma de reconocimiento. Cuando se percibe como un beneficio, puede convertirse en una poderosa herramienta de retención. Descubre cómo el [salario emocional puede marcar la diferencia en tu estrategia de talento].
¿Cómo hacer un DNC eficiente y alineado a resultados?
1. Inicia con una evaluación de desempeño clara y objetiva
Recoge evidencias concretas de qué se está haciendo bien y qué puede mejorar, desde datos duros hasta la percepción y visión del jefe.
2. Entrevista al colaborador
Conoce sus motivaciones, aspiraciones y metas. Esta información te permitirá diseñar un plan más significativo y personalizado. Utiliza la tecnología para hacerlo más rápido, eficiente y sobre todo: divertido.
3. Diseña un programa de capacitación híbrido
Combina lo virtual (videos grabados, plataformas interactivas) con lo presencial (dinámicas, ejercicios, coaching grupal). También puedes ofrecer sesiones en vivo, aunque sean en línea, para resolver dudas y que las personas se sientan acompañadas.
4. Evalúa cada tres meses
No esperes a la siguiente evaluación anual. Las evaluaciones trimestrales ayudan a ajustar el rumbo y a mantener motivado al equipo.
Si quieres impulsar una capacitación que deje huella, empieza por ti. Tal vez te interese [Cómo implementar cambios exitosos y destacar en tu empresa].
¿Por dónde empezar un programa de capacitación?
- Crea un plan estructurado con fechas, responsables y actividades.
- Comunica a los jefes los beneficios que obtendrán al participar.
- Empieza por áreas clave, prioriza habilidades críticas y mide los resultados desde el inicio.
¿Necesitas ayuda para tu DNC?
En Lernium te ayudamos a crear tu programa de capacitación anual, personalizado y orientado a resultados. Contamos con un amplio catálogo de cursos y herramientas para fortalecer tu cultura organizacional.